domingo, 21 de diciembre de 2014
Tributo al caballo
Actualmente, el cine, la música y demás tecnología multimedia nos permite realizar grandes trabajos, pudiendo homenajear al gran animal que es el caballo, un noble compañero que ha acompañado y ayudado al hombre desde antiguo y que sigue impresionando por su extraordinaria belleza.
Salto
Los concursos de salto constituyen el más reciente de los deportes hípicos de competición, El concepto es simple: se le exige al caballo que supere un recorrido de obstáculos de colores vivos en una pista cerrada. es sin duda un espectáculo intenso y atractivo, en el que la precisión y la potencia son esenciales.
Historia
Una versión embrionaria del salto fue llevada a cabo en una exhibición hípica en Dublín en 1865 celebrándose concursos de salto de altura y de longitud. En 1866, en París, tuvo lugar un concours hippique, en el que los competidores fueron juzgados por su apariencia antes de comenzar una serie de saltos de obstáculos naturales en el campo. La etapa posterior fue llevar los saltos a la pista, para beneficio de aquellos que querían contemplarlos, pero en los primeros años, los saltos sobre toscos postes endebles y setos de imitación eran poco más que un divertimiento para espectadores en el entreacto de otros eventos más importantes, como la conducción de carruajes.
En 1883 tuvieron lugar en Nueva York competiciones de longitud y de altura en el salto del caballo, y en 1900 el deporte comenzó a parecerse a su formato actual. En 1908 recibió un ímpetu significativo con el establecimiento de una exhibición hípica anual en el Olimpia, en Londres.
Las carreras de salto constituyeron un deporte internacional desde sus primeros días. Las primeras Copas de las Naciones, todavía la más importante competición por equipos, se celebró en 1910. Una prueba americana por equipos tuvo lugar en el Olympia en 1911, y una año después se otrogaron medallas por equipos (ganada por Suecia) e individual (ganada por Jean Cariou, de Francia, sobre Mignon) en los Juegos de Estocolmo.
En los primeros tiempos, las penalizaciones se imponían por desplazar unos ligeros tablones colocados encima del obstáculo, y se diferenciaba entre los golpes propinados con los miembros delanteros y traseros. Los competidores, casi siempre militares, podían mostrar al caballo el obstáculo antes de saltarlo. Se podían ganar o perder puntos por el estilo, y también por la dificultad del obstáculo. Las normas variaban entre los concursos de un mismo país.
En los primeros tiempos, las penalizaciones se imponían por desplazar unos ligeros tablones colocados encima del obstáculo, y se diferenciaba entre los golpes propinados con los miembros delanteros y traseros. Los competidores, casi siempre militares, podían mostrar al caballo el obstáculo antes de saltarlo. Se podían ganar o perder puntos por el estilo, y también por la dificultad del obstáculo. Las normas variaban entre los concursos de un mismo país.
El punto de inflexión
El punto de inflexión llegó después de la Segunda Guerra Mundial. La subida de popularidad de este deporte fue el resultado de un concurso, el Campeonato Victoria, celebrado en White City, Londres, a finales de verano de 1945. Fue planificado por el coronel Mike Ansell y la reorganizada British Showjumping Society. Ansell introdujo color, variedad e imaginación en los obstáculos, utilizando postes pintados, rellenos, arbustos y flores.
Una década después, la televisión llegó a un deporte que, a causa de su compacidad, cercanía y facilidad de comprensión de sus normas, reformuladas, demostró estar perfectamente adaptado al medio televisivo, ante una nueva y más amplia audiencia.
Su popularidad se ha diluido algo en Gran Bretaña desde 1970, pero en América del Norte y Europa continental el deporte es muy popular y, en particular, los concursos en espacios cubiertos atraen grandes y entusiastas audiencias.
Normas y formatos
Los concursos de salto pueden celebrarse a cubierto o al aire libre. Los recorridos se diseñan especialmente para cada competición, siendo las excepciones los llamados concursos Derby, los más famosos de los cuales son los de Hickstead y Hamburgo, que se disputan sobre el mismo recorrido permanente cada año. El Derby Bank y el Devil's Dyke, en Hickstead, son los más famosos concursos hípicos del mundo.
El formato de un concurso tiene una ronda preliminar, a partir de la cual se producen la selección de concursantes que participan en una serie cronometrada sobre un recorrido más alto y más corto. Pero se dan muchas variantes sobre este tema. Una, centrada en la velocidad, se celebra contrarreloj. Las de potencia se celebran sobre obstáculos paulatinamente elevados hasta llegar a un ganador. Una de seis barras consiste en seis obstáculos en línea recta. Una versión de recorrido libre deja al jinete atacar los obstáculos en el orden que prefiera, o en el que crea que será más rápido. Las penalizaciones, en la actualidad, son universales; cuatro puntos por un derribo, tres por la pimera desobediencia (rehúse o huida), seis por el segundo y eliminación por el tercero.
Obstáculos
Los obstáculos pueden estar construidos en varias formas básicas: vertical, escalonado( un fondo con escalonamiento creciente desde el frontal hacia atrás), paralelo u oxer, y la espalda de cerdo (fondo con la barra frontal y la posterior a la misma altura). El foso, con o sin barra baja al frente, prueba la habilidad para saltar en profundidad o a distancia. También puede incluir el agua en forma de canal, llamado Liverpool, frente a un obstáculo. Los obstáculos diseñados con imaginación pueden ser visualmente sorprendentes, siendo ejemplos notables los recorridos temáticos de los actuales Juegos Olímpicos.
El recorrido
El arte de los diseñadores de recorridos puede inaugurar o romper un tipo determinado de concurso. Su objetivo es proporcionar entrenamiento al público, con un estándar exigente de saltos (ya se trate de recorridos para jinetes novatos o para olímpicos) y un final emocionante para la competición. el recorrido no debe ser ni demasiado fácil ni demasiado difícil como para que nadie pueda superarlo. El diseñador debe poner a prueba la habilidad de los jinetes o amazonas situando los obstáculos con sentido común, en relación los unos con los otros, diseñando obstáculos que exijan una una monta precisa.
En cualquier nivel el jinete puede examinar el recorrido antes del concurso y planificará su recorrido de obstáculo a obstáculo con esa consideración en mente. Asimismo, deberá estudiar el recorrido para buscar los lugares en los que se puede ahorrar tiempo.
sábado, 20 de diciembre de 2014
Paños, vendas y protectores
Las extremidades del caballo son zonas sensibles al sobreesfuerzo, por lo que pueden lastimarse. Para cuidarlas correctamente puede ser necesario el uso de vendas o protectores.
Para ver si nuestro caballo necesita protección en las extremidades debemos observar cómo se mueve y si acerca mucho las manos o los pies. En caballos jóvenes que todavía buscan su propio equilibrio, es normal que se alcancen las manos con los pies. En este caso, se debe estudiar la anatomía del caballo para constatar que tipo de protector es el más adecuado para él y para la disciplina practicada.
En el mercado existe una gran variedad de protectores fabricados en distintos materiales que no solo protegen las patas del animal de los impactos sino que ayudan a que los tendones ligamentos trabajen cómodamente.
Cada día debemos limpiar los protectores tanto de caña como de cascos para asegurar su duración y para evitar que una falta de higiene cause dermatitis en la piel del caballo o una herida. Un protector mal colocado o roto no solo deja de cumplir su función sino que, además, puede ser causa de lesión.
Para ver si nuestro caballo necesita protección en las extremidades debemos observar cómo se mueve y si acerca mucho las manos o los pies. En caballos jóvenes que todavía buscan su propio equilibrio, es normal que se alcancen las manos con los pies. En este caso, se debe estudiar la anatomía del caballo para constatar que tipo de protector es el más adecuado para él y para la disciplina practicada.
En el mercado existe una gran variedad de protectores fabricados en distintos materiales que no solo protegen las patas del animal de los impactos sino que ayudan a que los tendones ligamentos trabajen cómodamente.
Cada día debemos limpiar los protectores tanto de caña como de cascos para asegurar su duración y para evitar que una falta de higiene cause dermatitis en la piel del caballo o una herida. Un protector mal colocado o roto no solo deja de cumplir su función sino que, además, puede ser causa de lesión.
Tipos de protectores
- Protectores de caña: por lo general, se utilizan materiales muy resistentes para este tipo de protector, ya que su función es la de proteger la parte interna de la caña del caballo, el menudillo y los tendones de impactos que pueden sufrir con la herradura de la pata opuesta.
- Protectores de menudillo: son específicos para proteger lo menudillos de los pies del caballo. No limitan su movilidad y los protegen eficazmente cubriendo toda la articulación.
- Anillos de goma: aunque no es uno de los más conocidos, este tipo de protector tiene dos funciones muy claras. Por un lado, protege la parte de la cuartilla, propensa a golpes y rozaduras en caballos de salto -se abrocha alrededor de la corona de la extremidad más propensa a los golpes. Por el otro, evita que aparezcan cordilleras, es decir, las rozaduras que se hacen los caballos que al al acostarse presionan su herradura en el codo.
- Campanas: fabricadas en forma de campana, como su nombre indica, estas protecciones están diseñadas para proteger las manos y los pies de golpes o alcances.
- Protectores de Polo: por la velocidad y la agresividad de los movimientos de esta disciplina, los caballos necesitan recibir un especial cuidado en sus extremidades por los sobreesfuerzos a los que se someten los tendones y por los golpes que puedan sufrir durante un partido, no solo propinados por sus propias patas sino también por las de otros caballos.
- Rodilleras o protectores de corvejón: se utilizan en caballos de salto o concurso completo para proteger la articulación de la rodilla del impacto contra la barra o obstáculo a saltar.
Combinar vendas y protectores
Las vendas se utilizan muy a menudo en lugar de los protectores de trabajo. Colocando un paño bajo la venda se consigue dar mayor sujeción y protección a los tendones y ligamentos. El problema de las vendas es que se han de colocar correctamente, ya que si se sujetan demasiado flojas, terminan por deslizarse y pueden provocar un tropiezo del animal. Por el contrario, excesivamente apretadas podrían provocarle una lesión al caballo al oprimir la circulación y la movilidad.
Las vendas han de colocarse con firmeza, asegurando que toda su superficie presione por igual la extremidad, sin cortar ni reducir en modo alguno el movimiento de la articulación del caballo. Deben sujetar con libertad.
Tipos de vendas
La función principal de las vendas es la de sujetar a la vez que proteger, por lo que dependiendo del uso que les queramos dar, podremos recurrir a un tipo u otro.
- Vendas elásticas: son comunes para disciplinas como el salto o el polo, en las que la velocidad el sobreesfuerzo van ligados. Con estas vendas debemos tener especial cuidado con la presión que aplicamos en la pata en el momento de vendar, puesto que un exceso de presión cortaría la circulación sanguínea y dañaría la elasticidad y movimiento de ligamentos y tendones. Siempre es aconsejable vendar con un paño bajo venda para amortiguar la misma presión de la venda. También es aconsejable utilizar vendas anchas para repartir mejor la presión en la pata.
- Vendas polares: muy utilizadas en la doma clásica, también tienen un poco de elasticidad, pero no tanta, ya que no cuentan con goma elástica en su interior. Siempre se utilizan con un paño bajo venda. Su función es la de proteger la pata de golpes y dar sujeción a tendones y ligamentos para minimizar el sobreesfuerzo que éstos hacen en los ejercicios.
- Vendas de descanso: pueden ser de lana, punto o incluso polares. Son más anchas y su función es la de, junto el paño bajo venda muy grueso, proteger las patas del caballo durante el descanso, aportando calor y protección al mismo tiempo. También se utilizan mucho para los transportes. Permiten aliviar las paras del caballo de la presión de los viajes largos.
jueves, 18 de diciembre de 2014
Terapias manuales: el masaje terapéutico
El masaje es una técnica sencilla de aplicar y bien admitida por la mayoría de los caballos; sin embargo, es necesario contar con unos conocimientos básicos de anatomía y fisioterapia para poder realizarla de manera correcta y sin el riesgo de causar perjuicio al animal.
La masoterapia, o terapéutica mediante el masaje, comprende un conjunto de maniobras que se ejecutan de forma metódica sobre una zona del organismo, realizando estiramientos y compresiones rítmicas de los tejidos, con el fin de producir en ellos los estímulos mecánicos necesarios para conseguir modificarlos de la forma adecuada en cada caso. Es una terapéutica pasiva, en la que el paciente no interviene activamente. Sus fines serán fundamentalmente terapéuticos o preventivos, aunque no podemos olvidar los deportivos y los que preparan para el esfuerzo.
Está demostrado que el masaje de estructuras lesionadas como músculos, tendones o ligamentos, acceder a la fase de recuperación, permite una reparación ordenada de las fibras, reduce el tejido cicatrizal, aumenta el rango de movimiento, así facilita la pronta recuperación de la funcionalidad.
La acción refleja se produce cuando el masaje ejercido sobre la piel es suave y deslizante, por lo que no va unida a efecto mecánico. Esta acción refleja se considera como un fenómeno del sistema nervioso autónomo; da lugar a una dilatación de los pequeños vasos y a un aumento de la permeabilidad capilar, lo que conduce a un incremento del flujo sanguíneo de la zona, con enrojecimiento y aumento de la temperatura transcurridos unos minutos. Produce, asimismo, una acción sedante y un efecto relajante general.
La acción mecánica se produce como consecuencia de las presiones ejercidas sobre los tejidos. Estas presiones producen desplazamientos, tanto de la sangre y la linfa hacia las zonas no comprimidas -lo que ayuda mecánicamente a la circulación-, como de los exudados y edemas, que, conducidos a zonas sanas, proporcionan una mayor superficie de contacto con éstas y favorecen su reabsorción.
Así como el efecto reflejo producido por el masaje realizado suavemente sobre la piel puede darse aisladamente, el efecto mecánico se acompaña siempre del efecto reflejo. Además, cuanto más eficaz va siendo el efecto mecánico, menor se va haciendo el reflejo.
A) Acción sobre la circulación sanguínea linfática
Se produce tanto por el mecanismo reflejo como por el mecánico. El estímulo generado por las manos del terapeuta provoca una dilatación de los vasos sanguíneos y linfáticos, favoreciendo la irrigación de la zona tratada.
Además, bien aplicado, el masaje aprovecha su efecto mecánico para drenar el edema de los tejidos y facilitar el retorno venoso y linfático, evitando y previniendo la estasis vascular,
B) Acción sobre la piel
Sobre la piel el masaje genera un aumento de la temperatura, consecuencia del incremento del flujo sanguíneo por la vasodilatación capilar producida por éste, así como de la activación que produce la circulación sanguínea y linfática.
La acción sobre las terminaciones nerviosas cutáneas sensitivas de las fibras nerviosas sensibles es anestésica, ya que aumenta el umbral de la sensibilidad dolorosa.
Al masaje de fricción es útil en los casos en que existan cicatrices, ya que con determinadas técnicas de masaje éstas pueden reducirse, reblandecerse y eliminarse las adherencias que se encuentran entre la piel y el tejido subyacente.
C) Acción sobre el sistema neuromuscular
Un masaje suave y superficial, por mecanismo reflejo, produce dilatación capilar y relajación muscular, lo que da lugar a sedación. Un masaje más rápido, por su acción mecánica, produce estimulación y mejora la excitabilidad muscular.
El masaje, al producir un aumento de la circulación, mejora la eliminación de los productos de desecho y así actúa sobre el músculo permitiendo su adecuada nutrición y disminuyendo el dolor post-ejercicio.
A pesar de estas acciones beneficiosas sobre los músculos, es necesario hacer constar que el masaje no aumenta la fuerza ni la masa muscular, mi impide por sí solo la atrofia muscular.
El incremento del flujo sanguíneo que origina el masaje produce también una mejoría en la nutrición de los nervios periféricos; éstos, según sean sensitivos, motores o secretores, responderán de forma diferente. Así, sobre los nervios sensitivos, el masaje produce una disminución de su sensibilidad, disminuyendo la percepción del dolor por lo que su acción es anestésica; sobre los motores, aument su excitabilidad, la contracción muscular y los deseos de actividad, y sobre los nervios secretores da lugar a un aumento de la actividad secretora de las vísceras.
D) Otros efectos
Las alteraciones articulares se ven también favorecidas por la acción mecánica del masaje. Éste genera una mayor elasticidad de sus componentes retraídos, facilita la absorción de los exudados articulares y contribuye a la resolución de adherencias peri y endoarticulares.
La masoterapia, o terapéutica mediante el masaje, comprende un conjunto de maniobras que se ejecutan de forma metódica sobre una zona del organismo, realizando estiramientos y compresiones rítmicas de los tejidos, con el fin de producir en ellos los estímulos mecánicos necesarios para conseguir modificarlos de la forma adecuada en cada caso. Es una terapéutica pasiva, en la que el paciente no interviene activamente. Sus fines serán fundamentalmente terapéuticos o preventivos, aunque no podemos olvidar los deportivos y los que preparan para el esfuerzo.
Está demostrado que el masaje de estructuras lesionadas como músculos, tendones o ligamentos, acceder a la fase de recuperación, permite una reparación ordenada de las fibras, reduce el tejido cicatrizal, aumenta el rango de movimiento, así facilita la pronta recuperación de la funcionalidad.
Efectos y reacciones fisiológicas
El masaje, según la técnica que se emplee y su modo de aplicación, puede producir una acción refleja de relajación, por estímulo del sistema nervioso autónomo, o bien un efecto mecánico, debido directamente a la presión producida por el masaje realizado.La acción mecánica se produce como consecuencia de las presiones ejercidas sobre los tejidos. Estas presiones producen desplazamientos, tanto de la sangre y la linfa hacia las zonas no comprimidas -lo que ayuda mecánicamente a la circulación-, como de los exudados y edemas, que, conducidos a zonas sanas, proporcionan una mayor superficie de contacto con éstas y favorecen su reabsorción.
Así como el efecto reflejo producido por el masaje realizado suavemente sobre la piel puede darse aisladamente, el efecto mecánico se acompaña siempre del efecto reflejo. Además, cuanto más eficaz va siendo el efecto mecánico, menor se va haciendo el reflejo.
A) Acción sobre la circulación sanguínea linfática
Se produce tanto por el mecanismo reflejo como por el mecánico. El estímulo generado por las manos del terapeuta provoca una dilatación de los vasos sanguíneos y linfáticos, favoreciendo la irrigación de la zona tratada.
Además, bien aplicado, el masaje aprovecha su efecto mecánico para drenar el edema de los tejidos y facilitar el retorno venoso y linfático, evitando y previniendo la estasis vascular,
B) Acción sobre la piel
Sobre la piel el masaje genera un aumento de la temperatura, consecuencia del incremento del flujo sanguíneo por la vasodilatación capilar producida por éste, así como de la activación que produce la circulación sanguínea y linfática.
La acción sobre las terminaciones nerviosas cutáneas sensitivas de las fibras nerviosas sensibles es anestésica, ya que aumenta el umbral de la sensibilidad dolorosa.
Al masaje de fricción es útil en los casos en que existan cicatrices, ya que con determinadas técnicas de masaje éstas pueden reducirse, reblandecerse y eliminarse las adherencias que se encuentran entre la piel y el tejido subyacente.
C) Acción sobre el sistema neuromuscular
Un masaje suave y superficial, por mecanismo reflejo, produce dilatación capilar y relajación muscular, lo que da lugar a sedación. Un masaje más rápido, por su acción mecánica, produce estimulación y mejora la excitabilidad muscular.
El masaje, al producir un aumento de la circulación, mejora la eliminación de los productos de desecho y así actúa sobre el músculo permitiendo su adecuada nutrición y disminuyendo el dolor post-ejercicio.
A pesar de estas acciones beneficiosas sobre los músculos, es necesario hacer constar que el masaje no aumenta la fuerza ni la masa muscular, mi impide por sí solo la atrofia muscular.
El incremento del flujo sanguíneo que origina el masaje produce también una mejoría en la nutrición de los nervios periféricos; éstos, según sean sensitivos, motores o secretores, responderán de forma diferente. Así, sobre los nervios sensitivos, el masaje produce una disminución de su sensibilidad, disminuyendo la percepción del dolor por lo que su acción es anestésica; sobre los motores, aument su excitabilidad, la contracción muscular y los deseos de actividad, y sobre los nervios secretores da lugar a un aumento de la actividad secretora de las vísceras.
D) Otros efectos
Las alteraciones articulares se ven también favorecidas por la acción mecánica del masaje. Éste genera una mayor elasticidad de sus componentes retraídos, facilita la absorción de los exudados articulares y contribuye a la resolución de adherencias peri y endoarticulares.
MANIOBRAS FUNDAMENTALES
Las maniobras utilizadas para realizar un masaje son variadas y difieren según la parte de la mano con que se realizan, la presión ejercida, la dirección, el ritmo, la velocidad, y los efectos esperados.
1. Frotación, presiones deslizantes superficiales o effleurage
Es un masaje superficial que se realiza con gran suavidad, deslizando la palma de la mano o el pulpejo de los dedos sobre la superficie cutánea. La mano, a ritmo lento, recorre varias veces la zona. La dirección del masaje es, generalmente, centrípeta, si bien cuando se actúa sobre un músculo se sigue el sentido de sus fibras. La presión ejercida debe ser gradual, suave y uniforme.
Esta técnica favorece los flujos de retorno venoso y linfático, y produce un aumento de la circulación de la superficie de la piel. Su principal efecto es analgésico, ya que insensibiliza poco a poco la superficie de la piel y prepara al caballo para poder ser sometido a otros tipos de masaje que utilizan presiones más enérgicas. Otro efecto que hay que tener en cuenta es la relajación muscular que produce, la cual hace que sea esta la maniobra con la que comienza y termina cualquier sesión de masoterapia.
2. Presiones locales estáticas
La acción del masaje es efectuada con la ayuda de una o de las dos manos colocadas planas y a menudo superpuestas, con el talón de la mano, con el pulgar o con el codo. La forma de hacerlo dependerá de la zona a tratar y de la presión que queramos ejercer. La presión realizada es perpendicular a la zona a tratar.
El aumento de presión será progresivo al igual que la descompresión. Se hará con ritmo lento. el fin es la inhibición muscular y por lo tanto la relajación muscular.
3. Fricción
En estas maniobras no existe deslizamiento de la mano sobre la piel del paciente. La mano se adhiere firmemente a la piel y se moviliza sobre los planos subyacentes.
En esta técnica se aplica una cierta presión y el sentido de la maniobra depende de la zona que hay que tratar y del problema que haya en ella. Se realiza fundamentalmente con las puntas de los dedos o la yema del pulgar aplicando bastante presión sobre la zona a tratar.
Algunos de sus objetivos terapéuticos son la liberación de fibrosis en las cicatrices (adherencias), favorecer la evacuación de edemas y hemorragias y reducir el espasmo muscular en regiones con puntos gatillo.
4. Amasamiento
Consiste en maniobras que comprimen y movilizan los músculos y los tendones bajo los dedos de la mano. Se utilizan una o dos manos para abarcar el grupo muscular entre el pulgar y los cuatro dedos restantes: se presiona y posteriormente se suelta, con un movimiento de estiramiento o circular al terminar la manipulación.
La presión ejercida es poco intensa e intermitente y las manos pueden no variar de posición durante el tiempo que dure el masaje, o pueden ir desplazándose a lo largo del músculo o la extremidad.
Las manos se mueven desde la inserción distal del músculo hasta la proximal, con maniobras perpendiculares o paralelas a la dirección de las fibras musculares, que poco a poco irán distendiéndose y relajándose.
El objetivo terapéutico de estas maniobras es favorecer la circulación al mejorar el retorno venoso y el drenaje linfático, así como provocar la eliminación de los productos de desecho. Mediante maniobras de atrapamiento repetidas, ejerciendo presión y soltando con un movimiento de estiramiento de las adherencias y tejidos fibróticos que se encuentran entre la piel y los tejidos subcutáneos de las zonas tratadas.
5. Percusión
Consiste en un golpeteo enérgico de los tejidos con las manos relajadas y en movimientos rápidos alternantes. La mano, para la realización de este movimiento de martilleo, puede disponerse de diferentes formas según cada caso. así, la percusión puede realizarse con la palma de la mano, con cu borde cubital, con la eminencia hipotenar, con la yema de los dedos o con el puño.
Por lo general, las percusiones son débiles y posteriormente se aumenta su intensidad de forma gradual.
Fisiológicamente producirá una estimulación de las estructuras subcutáneas, tanto de las terminaciones nerviosas periféricas, que transmiten los impulsos con mayor intensidad, como de los vasos, lo que dará lugar a un flujo sanguíneo más activo y a una mayor irrigación muscular.
Recomendaciones
El masaje puede ser beneficioso en las siguientes situaciones:- Antes de la competición o el ejercicio del caballo, en el calentamiento, para la prevención de lesiones.
- Después de la competición o el ejercicio en la recuperación y enfriamiento muscular, para reducir el riesgo de aparición de agujetas y rigidez.
- Mantenimiento del tono muscular durante las fases de entrenamiento.
- En zonas inmovilizadas, para asegurar una buena irrigación y frenar la aparición de la atrofia muscular.
- Para disminuir el dolor y reducir el edema post-traumático.
- Rehabilitación, para facilitar la reparación de lesiones musculares y evitar cojeras compensatorias en miembros contralaterales.
Contraindicaciones
El masaje esta contraindicado en:
- Inflamaciones agudas de la piel o tejidos blandos.
- Flebitis
- Hematomas recientes
- Infecciones o tumores de la piel
- Cuando existan fracturas óseas
- Desórdenes circulatorios
- Riesgo de hemorragias
lunes, 15 de diciembre de 2014
Los 5 fallos más comunes en la dieta del caballo
Hay unos cuantos fallos habituales y relativamente fáciles de evitar cuando hablamos de la dieta del caballo. Tanto nosotros como nuestros caballos, gozamos de una salud que viene proporcionada esencialmente por nuestro modo de vida y por lo que comemos. La dieta que recibe nuestro caballo, pues, es primordial para su bienestar y rendimiento físico a largo plazo.
A continuación, los 5 fallos más comunes en la dieta del caballo:
1. "La dieta del caballo puede ser muy barata". Debe tenerse en cuenta que los precios oficiales de comercio al por mayor de la avena, la cebada y el maíz - pues son los cereales más usuales en la composición de los piensos para caballos, y de los que deberían estar compuestos en su práctica totalidad- tienen un orecio medio de 240€ la tonelada; lo cual hace inexpicable que existan piensos para caballos que se vendan por debajo de esta cifra. Además, los piensos para caballo de deporte deben contener un corrector vitamínico, fibra, aceites y proteínas, etc. La manera más barata de dar de comer a un caballo es utilizar los alimentos locales que tengamos a nuestra disposición (paja, alfafa en rama, heno, avena) y completar esto con vitaminas y minerales que estas materias no tienen. Entre los piensos comerciales disponibles en el mercado podemos encontrar productos que están equilibrados y contienen los nutrientes necesarios.
2. "Los nutrientes no son importantes". Los nutrientes no son importantes si no se quiere que el caballo haga nada. Ahora bien, si se quiere que trabaje, que tenga buenos cascos, que aguante concursos o sea usado para la cría, será necesario proporcionar algún nutriente. El problema reside en el tipo y la cantidad. Es aconsejable pedir a nutricionistas que equilibren la dieta del caballo de acuerdo a sus necesidades. La nutrición proviene del forraje, los cereales, los piensos y los suplementos. La suma de lo que coma el caballo le proporcionará lo que necesita. Por tanto, hay que saber el aporte de cada alimento para poder calcular el total de los nutrientes que el animal recibe y, posteriormente, se debe comparar esto con las tablas de requerimiento nutricionales, publicadas a nivel internacional para el caballo de deporte.
3. "Todos los caballos deben comer lo mismo". Un caballo encerrado en un box con una lesión no necesita lo mismo que una caballo en competición, al igual que un caballo que soporta un jinete de 18 años y que mide 1,75 m no debe ingerir lo mismo que un poni que tiene que pasear a niños pequeños. En las cuadras, hay que tener una dieta base general para trabajos ligero a medio que sirva para los caballos de tanda y los caballos que trabajan poco. Luego, hay que ofrecer una dieta diferente para los caballos que están en competición, y otra para los que están fuera de trabajo o en tratamiento veterinario.
4. "Mi caballo estará mejor alimentado si le doy muchos suplementos". Lo más importante el asegurarse de que la dieta base es de calidad y después, generalmente, el único suplemento que necesitará el caballo será un electrolito cuando trabaje fuerte y sude. Puede que sea apropiado el uso de un suplemento en momentos puntuales, pero en general, si la dieta está equilibrada correctamente, no se debería necesitar muchos suplementos.
5. "Puedo utilizar forrajes de cualquier tipo y calidad, ya que añado pienso a la dieta de mi caballo". El forraje es la base de la dieta de nuestro caballo. No hay alimento, después del agua, más importante en la dieta. Si proporcionamos un forraje limpio y nutritivo, con una mezcla de plantas adecuadas, evitaremos la gran mayoría de problemas digestivos y asociados con la dieta. Los caballos mantendrán su peso y masa muscular y estarán entretenidos todo el día comiendo fibra.
A continuación, los 5 fallos más comunes en la dieta del caballo:
1. "La dieta del caballo puede ser muy barata". Debe tenerse en cuenta que los precios oficiales de comercio al por mayor de la avena, la cebada y el maíz - pues son los cereales más usuales en la composición de los piensos para caballos, y de los que deberían estar compuestos en su práctica totalidad- tienen un orecio medio de 240€ la tonelada; lo cual hace inexpicable que existan piensos para caballos que se vendan por debajo de esta cifra. Además, los piensos para caballo de deporte deben contener un corrector vitamínico, fibra, aceites y proteínas, etc. La manera más barata de dar de comer a un caballo es utilizar los alimentos locales que tengamos a nuestra disposición (paja, alfafa en rama, heno, avena) y completar esto con vitaminas y minerales que estas materias no tienen. Entre los piensos comerciales disponibles en el mercado podemos encontrar productos que están equilibrados y contienen los nutrientes necesarios.
2. "Los nutrientes no son importantes". Los nutrientes no son importantes si no se quiere que el caballo haga nada. Ahora bien, si se quiere que trabaje, que tenga buenos cascos, que aguante concursos o sea usado para la cría, será necesario proporcionar algún nutriente. El problema reside en el tipo y la cantidad. Es aconsejable pedir a nutricionistas que equilibren la dieta del caballo de acuerdo a sus necesidades. La nutrición proviene del forraje, los cereales, los piensos y los suplementos. La suma de lo que coma el caballo le proporcionará lo que necesita. Por tanto, hay que saber el aporte de cada alimento para poder calcular el total de los nutrientes que el animal recibe y, posteriormente, se debe comparar esto con las tablas de requerimiento nutricionales, publicadas a nivel internacional para el caballo de deporte.
3. "Todos los caballos deben comer lo mismo". Un caballo encerrado en un box con una lesión no necesita lo mismo que una caballo en competición, al igual que un caballo que soporta un jinete de 18 años y que mide 1,75 m no debe ingerir lo mismo que un poni que tiene que pasear a niños pequeños. En las cuadras, hay que tener una dieta base general para trabajos ligero a medio que sirva para los caballos de tanda y los caballos que trabajan poco. Luego, hay que ofrecer una dieta diferente para los caballos que están en competición, y otra para los que están fuera de trabajo o en tratamiento veterinario.
4. "Mi caballo estará mejor alimentado si le doy muchos suplementos". Lo más importante el asegurarse de que la dieta base es de calidad y después, generalmente, el único suplemento que necesitará el caballo será un electrolito cuando trabaje fuerte y sude. Puede que sea apropiado el uso de un suplemento en momentos puntuales, pero en general, si la dieta está equilibrada correctamente, no se debería necesitar muchos suplementos.
5. "Puedo utilizar forrajes de cualquier tipo y calidad, ya que añado pienso a la dieta de mi caballo". El forraje es la base de la dieta de nuestro caballo. No hay alimento, después del agua, más importante en la dieta. Si proporcionamos un forraje limpio y nutritivo, con una mezcla de plantas adecuadas, evitaremos la gran mayoría de problemas digestivos y asociados con la dieta. Los caballos mantendrán su peso y masa muscular y estarán entretenidos todo el día comiendo fibra.
El cólico equino
El término "cólico" es una de las palabras más temidas que pueden ser pronunciadas por un veterinario de caballos; no en vano, es una de las principales causas de enfermedad y muerte en esta especie.
El síndrome cólico es un dolor abdominal junto con otros síntomas similares, aunque puede tener diversos orígenes. Algunos de los síntomas más comunes son: pérdida de apetito, sudoración, mirarse el abdomen, permanecer tumbado, escarbar, revolcarse o adoptar postura de micción.
A diferencia de los humanos, en el caballo el cólico es casi siempre sinónimo de problema digestivo, mientras que los cólicos de riñón, hepáticos, etc., son casi inexistentes. En ocasiones se piensa que el dolor que muestra el caballo se debe a que por algún motivo es incapaz de orinar, ya que adopta esta postura, aunque en realidad es una manera de aliviar la presión del abdomen.
Dentro de los problemas digestivos, lo más habitual son las obstrucciones (comúnmente llamadas "paradas", que suelen resolverse sin necesidad de operar) y los desplazamientos de algún tramo de intestino. Otros problemas más graves son hernias inguinales (salida de un tramo de intestino junto al testículo) o torsiones, que casi siempre requieren cirugía. En todos los casos el cólico es una urgencia y precisa atención veterinaria inmediata.
En primer lugar, el veterinario realizará un examen del estado general del caballo (pulsaciones, color de las mucosas, temperatura, analitícas sanguíneas si es necesario) y una exploración digestiva más detallada. Esta última consistirá en la auscultación de los sonidos abdominales y en una palpación rectal para determinar si la posición del intestino es correcta, si existen tramos obstruidos u otras anormalidades.
Debido a la anatomía del estómago, los caballos son incapaces de vomitar. Éste es un de los motivos por los que el cólico es más grave en esta especie que en otras, ya que existe el riesgo de rotura del estómago. Así, parte del tratamiento consistirá en introducir una sonda a través del ollar hasta el estómago para vaciarlo. La sonda también nos permitirá administrar laxantes (vaselina, agua con electrolitos o sales).
Una complicación frecuente en caballos con cólico es la deshidratación, bien porque se acumulan líquidos en el interior del intestino, o por pérdidas (a través de la sonda, o en caballos con diarrea). Por ello, no es recomendable administrar diuréticos (a menos que sea la indicación del veterinario) sino a contrario (en algunos casos serán necesarios los sueros).
Para estimular el movimiento del intestino y facilitar el tránsito de las heces y la expulsión de gases, es conveniente mover el caballo a la mano o la cuerda. Además, el ejercicio también aliviará el dolor en casos leves. En otrso casos se pueden administrar analgésicos (medicamntos contra el dolor) e incluso sedaciones, si el ejemplar no se deja manejar o se revuelca constantemente.
El síndrome cólico es un dolor abdominal junto con otros síntomas similares, aunque puede tener diversos orígenes. Algunos de los síntomas más comunes son: pérdida de apetito, sudoración, mirarse el abdomen, permanecer tumbado, escarbar, revolcarse o adoptar postura de micción.
A diferencia de los humanos, en el caballo el cólico es casi siempre sinónimo de problema digestivo, mientras que los cólicos de riñón, hepáticos, etc., son casi inexistentes. En ocasiones se piensa que el dolor que muestra el caballo se debe a que por algún motivo es incapaz de orinar, ya que adopta esta postura, aunque en realidad es una manera de aliviar la presión del abdomen.
Dentro de los problemas digestivos, lo más habitual son las obstrucciones (comúnmente llamadas "paradas", que suelen resolverse sin necesidad de operar) y los desplazamientos de algún tramo de intestino. Otros problemas más graves son hernias inguinales (salida de un tramo de intestino junto al testículo) o torsiones, que casi siempre requieren cirugía. En todos los casos el cólico es una urgencia y precisa atención veterinaria inmediata.
Factores de riesgo y causas
Son muy pocos los casos en que existe una causa directa del cólico; algunos ejemplos son:
- El consumo de alimentos en mal estado o en cantidades desmesuradas.
- Los cambios bruscos de dieta.
- La privación de agua.
- Los parásitos internos, que en ocasiones pueden llegar a obstruir el intestino.
Sin embargo, la mayoría de veces no encontramos ninguna de las causas anteriores, aunque sí existen factores de riesgo que aumentan la probabilidad de que un caballo sufra cólicos. Éstos son:
- Una dieta pobre en fibra digestible y rica en concentrados.
- Las comidas abundantes.
- La ingesta de arena.
- La falta de ejercicio o, por el contrario, un ejercicio extenuante.
- Problemas dentales.
- La presencia de parásitos internos.
- Las semanas anteriores y posteriores al parto.
Qué hacer ante un caballo con cólico
Ante un caballo que presente un cólico se debe proceder de la siguiente manera:
- Llamar inmediatamente al veterinario para describirle los síntomas que presenta el ejemplar.
- Retirarle el alimento.
- Pasear al caballo o darle cuerda sin fatigarle.
- Si no podemos evitar que se tumbe o se revuelque, le soltaremos en un espacio amplio para evitar que se lastime con las paredes del box.
Qué no hacer
En cambio, jamás deberemos:
- Administrarle medicamentos sin consultar al veterinario.
- Intentar extraer las heces manualmente: una persona inexperta podría llegar a rasgas la pared intestinal, lo cual tendría consecuencias muy graves.
- Administrar aceite por vía oral, ya que si accidentalmente llegara a las vías respiratorias podría provocar una neumonía.
Tratamiento
El objetivo del tratamiento será restablecer lo antes posible el correcto funcionamiento del intestino, evitando posibles complicaciones.
En función del diagnóstico puede ser necesario trasladar al caballo a un centro hospitalario para operarlo (como en el caso de las hernias inguinales). En otros casos, se iniciará un tratamiento en las instalaciones en las que se encuentre el ejemplar.aunque se puede optar igualmente por la cirugía en caso de que la respuesta al tratamiento no fuera bueno.
Debido a la anatomía del estómago, los caballos son incapaces de vomitar. Éste es un de los motivos por los que el cólico es más grave en esta especie que en otras, ya que existe el riesgo de rotura del estómago. Así, parte del tratamiento consistirá en introducir una sonda a través del ollar hasta el estómago para vaciarlo. La sonda también nos permitirá administrar laxantes (vaselina, agua con electrolitos o sales).
Una complicación frecuente en caballos con cólico es la deshidratación, bien porque se acumulan líquidos en el interior del intestino, o por pérdidas (a través de la sonda, o en caballos con diarrea). Por ello, no es recomendable administrar diuréticos (a menos que sea la indicación del veterinario) sino a contrario (en algunos casos serán necesarios los sueros).
Para estimular el movimiento del intestino y facilitar el tránsito de las heces y la expulsión de gases, es conveniente mover el caballo a la mano o la cuerda. Además, el ejercicio también aliviará el dolor en casos leves. En otrso casos se pueden administrar analgésicos (medicamntos contra el dolor) e incluso sedaciones, si el ejemplar no se deja manejar o se revuelca constantemente.
Falsos mitos
- "Es fundamental hacer que el caballo orine". FALSO Si el caballo no orina es porque su organismo detecta una falta de líquidos y no deben administrarse diuréticos.
- "Si el caballo defeca, el cólico está resuelto." FALSO El intestino del caballo mide aproximadamente 30 metros, y el hecho de que defequeno descarta problemas en tramos anteriores.
- "Si no se revuelca, no es grave". FALSO Cada caballo mostrará el dolor de diferentes maneras, y si está muy débil puede que siemplemente está tumbado o quieto, aunque tenga un cólico grave.
sábado, 13 de diciembre de 2014
Pura Raza Española
El caballo Español o Andaluz, una raza antigua criada en el sur de España, desciende del caballo Ibérico, que fue tan apreciado entre los romanos. Caballos similares pueden verse en pinturas rupestres del sur de España que datan del año 18.000 a.C. La sangre de los caballos árabes y berberiscos se introdujo en los siglos VIII y IX, durante la invasión árabe de la península Ibérica, y los caballos que resultaron fueron vistos después a lo largo de Europa hasta por lo menos el siglo XVIII. La raza se mantuvo pura por los monjes cartujanos de Jerez de la Frontera, quienes crearon una yeguada con este fin en 1476. Hoy, la raza Española es cuidadosamente promovida y controlada en Sevilla, Córdoba y Granada, floreciendo donde la raza se originó hace tanto tiempo.
Además, el caballo Español ha tenido una influencia capital en la fundación de muchas razas famosas. Al Lusitano y el Alter-Real están muy relacionados, y el Lipizzaner y el Kladruber, así como muchas razas alemanas, son sus descendientes. En Gran Bretaña, el caballo de Gales, el Bayo de Cleveland y el poni de Connemara tienen rastros del caballo Español, así como la mayoría de razas americanas.
Usos
El Andaluz es famoso por su gran influencia en la cría desde tiempos antiguos. Apreciado en la ejecución de la doma de alta escuela y como caballo de desfile, también se utiliza en el rejoneo y para conducir el ganado. Su monta resulta un placer y aunque su acción circular no suele considerarse adecuada para la domo convencional, puede ser un brillante saltador. Es crecientemente apreciado en la conducción de carruajes de competición.
Aspecto
El caballo Español es corto, de constitución muy fuerte, con cuartos traseros ligeramente inclinados y crin y cola largas y onduladas. La cabeza es bastante grande con un perfil convexo y ollares anchos, mientras que el cuello es alto y arqueado, dándole una gran presencia y un equilibrio natural. Los hombros son bastante rectos y la cruz más bien plana, como parte de un dorso corto y fuerte, con un lomo poderoso y unos cuartos traseros asimismo potentes. Los pies son muy duros, adaptados a su entorno caluroso y seco. El color predominante es el tordo, pero admite una gran diversidad de capas.
Características
El Español es un caballo llamativo, que aparenta ser mayor de lo que es. Cuenta con andaduras ,uy activas y con un porte orgulloso. La marcha al paso es pronunciadamente rítmica, el trote alto y redondo y el medio galope no abarca mucho terreno, pero resulta espectacular. Esta raza es flexible y atlética, combinando la alegría de espíritu con la suavidad y la docilidad.
Altura
Como media, 1,57 a la cruz.
Doma clásica
Dressage es una palabra francesa que puede traducirse como "adiestramiento" y su objetivo es la producción de un caballo correctamente desarrollado, dúctil, obediente al jinete o amazona y de monta cómoda. Así, cualquier caballo para monta deberá haber aprendido los aspectos básicos de la doma durante su primera instrucción.
La primera evidencia de un sistema de adiestramiento progresivo está en los escritos de Jenofonte (435-355 a.C.) que fue el primero en considerar la monta como una ciencia o arte. Sus palabras fueron una fuente de inspiración durante el Renacimiento, en cuyo periodo los caballistas europeos comenzaron a desarrollar la monta clásica, que constituye el fundamento de la equitación moderna. Los preceptos clásicos eran por entonces patrimonio de los ejércitos -que por lo general, contaban con los jinetes más disciplinados y las mejores monturas-. Una forma temprana de doma de competición fueron los concursos del siglo XIX para los oficiales de caballería mejor entrenados.
Doma moderna
Como deporte de competición, la doma moderna implica la ejecución de una serie de movimientos de colocacción a diferentes aires o andaduras (al paso, trote y medio galope) en determinados puntos de una pista rectangular. Hay pruebas de doma adaptadas para caballos y jinetes en todas las etapas de adiestramiento, desde las más simples a nivel preliminar hasta el Grand Prix Internacional y la competición olímpica.
A cualquier nivel de doma la pericia se juzga en relación con estándares establecidos. Cada movimiento -y hay 20 en una prueba de Grand Prix que deben realizarse de memoria- se califica de 0 (fallido) a 10 (excelente). Las pruebas en los niveles más bajos se disputan en pistas de 40 x 20m, y las de nivel medio y superior en pistas de 60 x 20m. Cada una está marcada con un conjunto de letras alrededor del perímetro y hacia el centro para guiar al jinete o amazona.
Las pruebas más simples implican movimientos muy básicos. En la medida que el caballo y el jinete progresan, los movimientos requeridos se hacen más difíciles. El caballos ha de ser capaz de moverse de forma lateral tanto como hacia delante y de extender o acortar los trancos en las tres andaduras. En los niveles más altos, algunos de los movimientos más difíciles incluyen la pirueta, en la que el caballo pivota sobre un miembro posterior dando un giro completo; el passage, en el que el caballo avanza con un trote elevado y a saltos. La piaffe, un passage con muy poco movimiento hacia delante, y los cambios de pie al vuelo, en los que el caballo pasa de un medio galope a una mano a un medio galope a la otra sin pasar entre ambos a una andadura al trote. En una serie de cambios a un tiempo el caballo parece brincar a la comba.
Piaffe
La doma impone un gran esfuerzo físico y mental en los niveles superiores y el mejor tipo de caballo de caballo necesita una excelente conformación, con particular fuerza en el dorso y en los cuartos traseros, y un temperamento muy equilibrado.
A cualquier nivel, el caballo será juzgado por la regularidad y la libertad de sus andaduras, su tranquilidad y obediencia, su equilibrio y cadencia y su atención y buena predisposición a las órdenes del jinete. El jinete y la amazona se juzgan según su habilidad para conseguir estas cualidades en el caballo, y la precisión con la que describan los movimientos. En los niveles inferiores solo hay un juez colocado en el punto C, pero en las competiciones internacionales hay cinco para asegurar una evaluación justa.
Las cuatro pruebas de mayor nivel son, en orden de dificultad: el Premio San Jorge, el Intermedio I y II, y el Grand Prix, cada uno de ellos ligeramente revisado cada cuatro años.
A continuación, compartimos un vídeo de una reprise efectuada por el jinete de doma clásica Juan José Ruiz Garrido y Señorío IV en la Copa Del Rey 2014:
jueves, 11 de diciembre de 2014
Capas
El color de la capa del caballo es transmitido por herencia. Llamamos capa de un caballo al conjunto de pelos y crines que recubren su cuerpo. Junto con la configuración general del cuerpo permite diferenciarlo de los demás animales de su misma especie. El color de la capa se define por el color del cuerpo y de los cabos (hocico, puntas de las orejas, crines, cola y patas).
Las principales capas son:
La capa castaña ofrece distintas variedades: desde el castaño claro hasta el castaño oscuro, casi negro, pasando por un castaño fuego y un castaño dorado. Los caballos castaños suelen tener negras la punta de las orejas, la crin, la cola, la parte inferior de las patas y el hocico. No obstante, en la cara pueden presentar diferentes manchas blancas; al igual que en las patas (denominadas guantes). Las variedades más frecuentes son:
Las principales capas son:
Castaño
La capa castaña ofrece distintas variedades: desde el castaño claro hasta el castaño oscuro, casi negro, pasando por un castaño fuego y un castaño dorado. Los caballos castaños suelen tener negras la punta de las orejas, la crin, la cola, la parte inferior de las patas y el hocico. No obstante, en la cara pueden presentar diferentes manchas blancas; al igual que en las patas (denominadas guantes). Las variedades más frecuentes son:
- Castaño bocifuego: Castaño muy oscuro, casi negro, pero con zonas rojas muy brillantes en las ingles, hocico y babilla.
- Castaño claro o melero: Similar al de las castañas antes de madurar.
- Castaño claro: de un rojo claro con pocos pelos negros.
- Castaño encendido: con mucho pelo rojo y muy brillante.
- Castaño entrepelado: con algunos pelos blancos.
- Castaño guinda: Bastante oscuro y de tonalidad que recuerda a la guinda madura.
- Castaño lobero: de tonalidad grisácea similar a la piel del lobo.
- Castaño oscuro: con muchos pelos negros.
- Castaño peceño: de color muy oscuro, y y difícil de diferenciar del negro peceño, del que se distingue por presentar tonalidades rojizas entorno a los ojos, el hocico, las axilas y el vientre.
Alazán
La capa alazana es de tonalidad rojiza aunque en variedades muy distintas, desde el alazán claro hasta el alzán tostado, que presenta un color parecido al del hígado. Las tonalidades de los pelos rojos o castaños que forman la capa alazana pueden tender a colores como el canela, el caoba o el café tostado.
En los caballos de esta capa, el pelo de los cabos suele ser idéntico al del resto del cuerpo, excepto en la variedad pelo de vaca, que tienen la crin muy clara, o los que presentan marcas blancas.
Las principales variedades de alazán son:
- Alazán pelo de vaca: con los pelos de la crin muy claros.
- Alazán pálido: de color muy claro.
- Alazán guinda o encendido: de color muy intenso, casi caoba.
- Alazán dorado: capa de color oscuro.
- Alazán tostado: la variedad más oscura de la capa alazana, con un color similar al del hígado.
Tordo
La capa torda es el resultado de la mezcla de pelo blanco y negro por todo el cuerpo. No se mantiene fija a lo largo de la vida del caballo, puesto que los tordos, cuando nacen, son potros casi negros en los que pronto aparecen pelos blancos que aumentan a medida que el caballo crece hasta que se vuelve completamente blanco cuando llega a adulto. No obstante, hay algunas excepciones dependiendo de la variedad de tordo de la que se trate:
- Tordillo: con mayor proporción de pelos negros que de blancos.
- Tordo apizarrado: de color oscuro y tonalidad azulada.
- Tordo atruchado: de color blanco con motas de pelos rojizos.
- Tordo claro: con predominio de los pelos blancos sobre los negros.
- Tordo mosqueado o picazo: de color blanco con pequeñas motas de color negro.
- Tordo oscuro: de mayor predominio de pelos negros que el tordillo.
- Tordo plateado: con pelo blanco sobre piel negra, que, al reflejarse a través del pelo blanco, parece plateado.
- Tordo rodado: con fondo blanco u oscuro: los pelos blancos y los negros forman manchas redondeadas. Con una tonalidad más clara cuan una tonalidad más clara cuando el fondo es blanco y al revés cuando el fondo es oscuro.
Rodado en fondo blanco
Rodado en fondo oscuro
- Tordo ruano: con una capa compuesta por la combinación de pelos blancos, negros y rojizos en distintas proporciones. Hay dos variedades: el rosío y el pío.
- Tordo sucio: con pelos blancos y negros que no mantienen la misma proporción en todo el cuerpo, con zonas más claras y otras más oscuras.
- Tordo vinoso: con los pelos blancos mezclados con pelos rojizos, con o sin presencia de pelos negros.
Ruano
La capa ruana es una mezcla de pelo negro, blanco y alazán- La mayoría de los caballos ruanos tienen cabeza, crin y patas oscuras. Hay tres variedades de ruanos.
- Ruano azul: con una mezcla de pelo negro, marrón negruzco y blanco, lo que le da cierto aspecto azulado. La cabeza, extremidades, crin y cola suelen ser negras.
- Ruano bayo o ruano rojizo: con mezcla de pelo alazán y blanco, lo que le da un cierto matiz rojizo. En estos caballos, los cabos suelen ser negros.
- Ruano alazán u overo: con mezcla de pelos alazán y blanco por todo el cuerpo, incluidos los cabos. En algunos casos, los ejemplares de esta variedad presentan marcas blancas que no desvirtúan su capa.
Los caballos ruanos cambian la tonalidad del pelo variando la proporción de pelos blancos, aunque de distinto modo a los tordos. No se vuelven más blancos según envejecen, sino que su proporción varía anualmente entre invierno y verano.
Bayo
La capa baya puede presentar un color crema, dorado o isabela. Normalmente se aprecia una línea o cordón en el dorso, denominada raya de mulo. Además, algunos ejemplares también presentan rayas de cebra en las patas.
- Bayo isabela: Es la variedad principal y comprende, de un color pálido sobre piel rosa. Comprende tonos del rojizo al crema. Existen dos variedades: palomino, de tono dorado con crines y cola blancas, y el perla, muy claro con crines y extremidades negras. Suelen tener los ojos oscuros, a veces azules, y cuando tienen un color indefinido se les suele llamar cremellos.
Variedad Palomino
Variedad Perla
Cremello
- Bayo crema: La oscura se parece a la de los ratones, mientras que la clara es similar a la de las liebres.
- Bayo dorado: Es una capa brillante, con reflejos dorados que dan nombre a la capa. Suele presentar manchas blancas.
Pío
Los caballos de capa pía o pinta presentan extensas manchas regulares de bordes bien definidos. En su denominación, se hace referencia, en primer lugar, al color predominante. Junto con otras capas similares, pero menos frecuentes, como las que tienen más de dos colores, se las engloba bajo la denominación común de capa manchada (capa que engloba manchas extensas de dos o más colores). Los píos o pintos tienen extensas manchas de color alazán, castaño o de cualquier otro color excepto el negro. También pueden tener uno o los dos ojos incoloros, sobretodo los ejemplares que tienen la cara blanca.
El juego de colores puede ser muy variado: pintos negros, pintos bocifuegos, pintos castaños, pintos alazanes, pintos palominos, pintos bayos, pintos perlinos, pintos cremellos. La capa pinta se subdivide en cinco subpatrones: overo, tobiano, sabino, bajos blancos y skjevet, una variedad que parece haber desaparecido. Para designarlos se nombra el color que más prevalece.
La capa overa es una mezcla de pelo blanco y alazán que deriva en gris uniforme, aunque más o menos claro según sea mayor o menor la proporción de pelos blancos en la mezcla. El pío overo lleva manchas blancas, casi siempre hacia la mitad del cuerpo y bastante horizontales. No suelen prolongarse hasta la cruz. Normalmente tiene color en las patas, con calzado blanco no muy alto. en ocasiones, tiene en la cara un lucero corrido y ancho.
Por otra parte, existe una capa con pintas distinta que presentan los caballos con pintas más conocidos son los de la raza americana Appaloosa. Dentro de ella se diferencian cinco variedades principales:
- Appaloosa leopardo: con el fondo blanco o muy claro y pintas de cualquier color.
- Appaloosa manchado: con la grupa o el dorso de fondo blanco y pintas de cualquier color.
- Appaloosa blanco: con una capa de color moteado sobre un fondo negro, que con la edad, se aclara a casi blanco, sin que se modifiquen ni la cara ni las patas.
- Appaloosa copo de nieve: con puntos blancos sobre un fondo negro.
- Appaloosa nevado: con puntos blancos sobre un fondo negro en la grupa y dorso posterior.
Negro
La capa negra tiene pelos negros sobre piel negra; las crines, los ojos y los cascos también son negros. Las capas de un negro intenso y azabache son raras. Los pelajes negros tienden a tener un brillo rojizo.
Los caballos de capa negra pertenece a una de estas cinco variedades:
Los caballos de capa negra pertenece a una de estas cinco variedades:
- Negro azabache: con mucho brillo e intenso color negro.
- Negro peceño: con reflejos rojizos debido a que las puntas de los pelos negros tienen esa tonalidad.
- Negro morcillo: menos brillante y vivo que el azabache. el nombre le viene de que recuerda a la mora madura.
- Negro hito: sin ningún pelo blanco.
- Negro entrepelado: con presencia de pelos blancos en proporciones mu pequeñas.
Algunos caballos de capa negra presentan manchas blancas en la cara, en forma de estrella o cordón, y calzas por debajo de la rodilla.
Blanco
La blanca es una capa formada exclusivamente por pelos blancos. Ello hace que los ejemplares que tienen esta capa no sufren modificaciones con la dad. Tienen las mucosas de color claro. Se consideran tres variedades fundamentales:
Albino
Existe un cuarto grupo de caballos blancos, los caballos albinos. Su color no debe ser considerado una capa sino un defecto genético que se transmite por herencia: carecen en su ADN del gen encargado de metabolizar el aminoácido que da origen a la malanina. La ausencia de este pigmenta do origen a caballos blancos, con ojos rojos, hipersensibles a la luz. Los caballos albinos no selen utilizarse para la reproducción al ser un defecto genético.
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