Andaduras del caballo

Por su naturaleza, el caballo tiende a mantenerse en reposo la mitad de tiempo, pastando o durmiendo.
Cuando se desplaza de forma natural, lo hace al paso, al trote o al galope.

El hombre ha forzado al caballo, sobre todo a determinadas razas, a incrementar las variantes de sus andaduras, los tipos de pasos utilizados y la forma de darlos. Por eso, los aires que ejecutan los caballos pueden ser de dos clases: naturales (derivados del perfeccionamiento que el caballo hace naturalmente) y artificiales (se le enseñan por medio de la doma). En los artificiales se desplaza el centro de gravedad a conveniencia del jinete, quien adopta el equilibrio adecuado para el aire que va a llevar a cabo.

Por su forma de realización, las andaduras se dividen en simétricas y asimétricas.

Simétrica

• Paso: el paso es una andadura de cuatro batidas, ya que el caballo apoya tres patas en el suelo cuando tiene una en el aire. Levanta cada pata en la siguiente sucesión: pata trasera, delantera del mismo lado, la otra trasera y la delantera correspondiente.

• Trote:  es una andadura de dos batidas en la que las patas delantera y trasera en diagonal pisan alternativamente. Por ejemplo: trasera izquierda y delantera derecha seguidas de delantera izquierda y trasera derecha.

Asimétricas

• Medio galope: es una andadura de tres batidas en la que pisan simultáneamente dos patas en diagonal y las otras dos, en tiempos distintos. Por ejemplo, en el galope a la izquierda, en cada tranco pisa primero la pata trasera derecha seguida de la trasera izquierda y la derecha delantera y, por último, la delantera izquierda.

• Galope: Es una andadura de cuatro tiempos, extensión del medio galope con las cuatro pisadas completamente separadas  un aumento notorio de la fluidez y soltura de la andadura. Por ejemplo: pata trasera izquierda, trasera derecha, delantera izquierda y delantera derecha.